Bill Belichick anunció su renuncia a los Jets en la conferencia de presentación, al tiempo que se daba a conocer que se iba con los Pats
La mente maestra de una de las franquicias más ganadoras de la historia del deporte, el sith de la NFL; el creador del Mantra: Haz tu trabajo (Do your Job). El más patriota de todos, el de los ocho anillos de Super Bowl. Ese es Bill Belichick.
Nació en Nashville, Tennessee, en 1952. Su padre, Steve Belichick, fue durante 33 años, entrenador y visor para el equipo colegial de la Marina , y en el profesionalismo.
Sirvió a los Leones de Detroit, su herencia: el libro Métodos de scouteo en el futbol americano (Football Scouting Methods Ronald Press), con el que se ganó a pulso la fama de ser un genio en la preparación de planes de juego, y su hijo Bill, de quien desde muy pequeño en reuniones con amigos y entrenadores presumía por su increíble memoria e inteligencia para aprenderse jugadas y esquemas sin problema alguno.
El amor por los números y las estadísticas, llevarón a Bill Belichick a estudiar economía en la Universidad Wesleyan en Middletown, Connecticut, pero el fútbol americano siempre estuvo ligado a su día a día.
Se manejaba bien como líder en la ofensiva, ya que jugó como centro y sorprendentemente a pesar de su baja estatura, como ala cerrada. Además, también fue capitán del equipo de Lacrosse.
¿Se imaginan a este hombre en pantalón corto y de banda en la cabeza siendo sutil con la raqueta? Pues sí, Bill era también un gran jugador de squash.
Tras su graduación de Wesleyan en 1975, tomó un trabajo con los Baltimore Colts por sólo 25 dólares a la semana, una cifra extremadamente pequeña comparada con lo que gana hoy en día.
Fungía como algo parecido a un visor para el entrenador en jefe de los colts Ted Marchibroda. A partir de ahí, Belichick participó con varios equipos de la NFL, incluidos los Leones Detroit y los Broncos de Denver, mientras intentaba escalar para llegar a ser entrenador en jefe.
En 1979, Belichick fue contratado por los Gigantes de Nueva York para hacerse cargo de los equipos especiales, aunque seguía practicando todos los roles: entrenador de equipos especiales y asistente defensivo.
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Su estadía en Nueva York con los Gigantes duró 12 temporadas bajo la guía de su mentor, el entrenador en jefe Bill Parcells, quien dirigió a la franquicia a un par de victorias en los súper tazones de 1986 y 1990 Y a Bill a ganar sus dos primeros anillos de Super Bowl.
En 1991, el dueño de los Cleveland Browns, Art Modell, lo contrató para guiar al equipo con su gran conocimiento e inteligencia, llegaba el momento de dar un gran paso y ser entrenador en jefe, aunque no resultaría como él lo pensaba.
Su comportamiento era muy complicado con la prensa, solía mantenerse al margen de todo. Lo que provocó dificultades para ganarse a los fanáticos y su relación con el dueño tampoco fue la mejor, por lo que en la temporada de 1995, tras el anunció de Art Modell de que trasladaría la franquicia a Baltimore, Belichick fue despedido.
No tardó en encontrar trabajo con su antiguo mentor, Bill Parcells, quien en ese momento era entrenador en jefe de los Patriotas de Nueva Inglaterra, la temporada de 1996, fue un año agridulce, ya que llegaron al Super Bowl, pero perdieron ante los empacadores de Green Bay.
Ese, su primer acercamiento con los Pats fue muy corto, y al finalizar la temporada, Bill sirvió como moneda de cambio, ya que fue contratado como entrenador interino por los Jets de Nueva York, para que después, Parcells llegará a esa franquicia.
Como aún tenía contrato con Nueva Inglaterra, no podía firmar con los Jets por temas legales, por lo que la solución fue intercambiarlo por dos jugadores.
En 1999, tras 3 años con los Jets de Nueva York, Bill Parcells anunciaba su retiro por segunda vez, sólo fueron 3 años sabáticos y abogó para que Bellichick se quedara con el cargo de entrenador en jefe.
Ese fue el momento que cambio el destino de Bill, y uno de los instantes más bizarros en la historia de la NFL; en plena conferencia de prensa para su presentación, Bellichick anunció su renuncia a los Jets de Nueva York, al tiempo que se daba a conocer que se convertía en el nuevo entrenador en jefe del equipo de Nueva Inglaterra. Tenía claro que él era un Patriota.
Pero de eso y su legado en Nueva Inglaterra hablaremos la próxima semana, en la siguiente entrega.
IPR
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