
Así lo dio a conocer el subsecretario de Desarrollo Político y Social del estado, Francisco Rodríguez Cisneros.
Luego del ataque armado ocurrido la noche del sábado en Ayutla, en el que murieron 10 policías comunitarios y un mecánico de la comunidad de Tlalapa, las autoridades anunciaron un reforzamiento de la seguridad en la región de la Costa Chica, en Guerrero.
El funcionario señaló que será el Gabinete de Seguridad del Gobierno federal quien informe sobre los avances en las investigaciones, tal como lo indicó recientemente la presidenta Claudia Sheinbaum. Además, explicó que, en la mesa de trabajo para la construcción de la paz, se acordó fortalecer el diálogo con los siete grupos de policías comunitarios que operan en Ayutla y zonas vecinas como Tecoanapa, con el objetivo de prevenir nuevos hechos violentos.
Rodríguez Cisneros subrayó que ya existen antecedentes de acuerdos de respeto mutuo con las organizaciones comunitarias, y recalcó que el gobierno de Guerrero mantiene como prioridad la búsqueda de la paz, la estabilidad y la protección de los derechos humanos, trabajando en conjunto con autoridades federales, municipales y la ciudadanía.
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Por otro lado, integrantes de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG) confirmaron que, durante la emboscada, además de los 10 comunitarios fallecidos, también perdió la vida un mecánico. Según reportes, el hombre acudió al hospital tras recibir información sobre un familiar herido, pero al llegar fue interceptado por hombres armados y posteriormente hallado sin vida.
Este domingo por la tarde, las personas asesinadas durante el ataque fueron sepultadas en sus respectivas comunidades.