Programas que permiten a ciertos grupos de migrantes permanecer en el país serán eliminados.
Se estima que las deportaciones masivas de Trump podrían costar 241 mdd al día. Esto incluiría movilizar personal para localizar migrantes, con un objetivo inicial de deportar un millón de personas en el primer año, es decir, 2,739 al día. Este esfuerzo enfrenta importantes obstáculos, como la saturación de las cortes de inmigración, con más de 4 millones de casos pendientes, y la resistencia de 14 países a recibir deportados.
El vicepresidente electo, JD Vance, ha señalado que se deportará a un millón de personas en el primer año, mientras que Stephen Miller, asesor político, menciona un objetivo total de 11 millones de deportaciones. Asimismo, Tom Homan, próximo encargado de la frontera, indica que se dará prioridad a los delincuentes ya localizables.
Entre las medidas previstas está la construcción de carpas que funcionarán como centros de detención, ampliando la capacidad actual hasta 10 veces más. Además, se eliminarán programas que permiten a ciertos grupos de migrantes, como los dreamers y beneficiarios de estatus de protección temporal, permanecer en el país.
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El plan, aunque ambicioso, es considerado poco realista por expertos, como John Sandweg, exfuncionario de inmigración, quien resalta dos grandes retos: localizar a los migrantes y superar las barreras legales existentes. Por ejemplo, aquellos que han solicitado asilo son más fáciles de localizar, ya que deben reportar sus direcciones mientras esperan audiencia en corte.
