
Claudia Sheinbaum informó que se reunirá con actores de doblaje y autoridades culturales para diseñar medidas de protección ante el uso de inteligencia artificial
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, aseguró que su gobierno establecerá medidas para proteger los derechos laborales de los actores de doblaje frente al avance de la inteligencia artificial, luego de las protestas realizadas por este gremio que denuncia el uso indebido de sus voces con fines comerciales.
Sheinbaum indicó que se realizará un encuentro con representantes del gremio, la Consejería Jurídica y la Secretaría de Cultura para analizar los mecanismos de protección que se pueden aplicar en favor de los actores. “Tienen razón y ya a través de la Consejería Jurídica y la Secretaria de Cultura nos vamos a reunir con ellos para ver qué esquemas de protección a su trabajo y a su voz tienen que utilizarse para evitar el uso de lo que es su herramienta de trabajo principal que es su voz a través de la Inteligencia Artificial”, expresó la mandataria.
Te puede interesar: Dinamarca planea proteger rostros y voces del uso de la Inteligencia Artificial
Al ser consultada sobre la posibilidad de reconocer la voz como un dato biométrico que requiera protección especial, Sheinbaum comentó que se analizará este aspecto, aunque subrayó que lo prioritario es resguardar el derecho de cada actor sobre el uso de su voz.
“Hay que ver si es dato biométrico o qué, pero lo cierto es que es una profesión muy importante, muy reconocida en México desde hace muchísimos años, el doblaje que se hace en México es muy bueno, hay muchas personas que se dedican a ello”, señaló.
Esta postura se dio tras una manifestación masiva en el Monumento a la Revolución en la Ciudad de México, donde actores, locutores, técnicos, músicos, productores y estudiantes exigieron frenar el uso no autorizado de sus voces e imágenes por parte de herramientas de inteligencia artificial. Bajo la consigna “La IA no reemplaza”, los participantes del mitin reiteraron su derecho a que su trabajo no sea replicado sin su consentimiento, en un momento en el que la industria creativa en México busca establecer límites ante el uso de tecnologías emergentes.