Sheinbaum destacó que la respuesta del gobierno afectaría a empresas de EU, por lo que es crucial llegar a acuerdos.
Claudia Sheinbaum presentó una carta dirigida a Donald Trump, presidente electo de EE. UU., en respuesta a su anuncio de imponer aranceles a México y Canadá, y expresó su esperanza de alcanzar un acuerdo beneficioso para ambos países.
Desde el Salón Guillermo Prieto de Palacio Nacional, la presidenta insistió en que la respuesta de su gobierno ante la acción de Trump provocaría que empresas de origen estadunidense también se vean afectadas.
“Lo que queremos decir en la carta, es que subir aranceles a México significa también poner aranceles de este lado y a lo que va a llegar al final es a dañar empresas que trabajan en México y Estados Unidos que son estadounidenses, y tienen decenas de años en México”, explicó.
Como ejemplo a lo anterior, Sheinbaum Pardo, expuso que una de la empresas que podrían sufrir con esta medida es General Motors, pues cuenta con una estadía en el país de 80 años, por lo que esta acción por parte del republicano, lo que haría sería afectar, de manera directa, a la antes mencionada, así como a la economía del país que está por liderar.
“¿Si se suben los aranceles a quienes van a dañar? A General Motors. Pero no solo eso, sino que los afectados principales van a ser los consumidores de Estados Unidos que compran vehículos de General Motors”, apuntó.
También enviará misiva a Canadá
En más sobre el tema, la jefa de Estado, reveló que además del documento que enviará al republicado, hará lo propio con el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, a quien también le hará llegar una carta.
Sheinbaum aseguró que hay desinformación en torno a las aportaciones de México al T-MEC, así como de sus relaciones comerciales con China, temas que deben de ser aclarados para no perjudicar las relaciones.
Las declaraciones de Sheinbaum se dan luego de que Trudeau aseguró el pasado jueves que mantener el pacto comercial con México y Estados Unidos, dependerá de “las decisiones que tome México”. En este sentido, varios funcionarios canadienses externaron su preocupación de que China pueda aprovechar el T-MEC para utilizar a México como base para exportar productos baratos, el primer ministro afirmó que, aunque la primera opción es continuar el acuerdo, “puede que tengamos que buscar otras opciones”.
Tras esto, la presidenta aseguró que el T-MEC es un acuerdo que beneficia a los tres países involucrados, no únicamente a México, por lo que desde su trinchera, la intención es continuar.
