La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, tuvo una primera llamada con Donald Trump para felicitarlo por su triunfo en las elecciones de Estados Unidos
Claudia Sheinbaum sostuvo una llamada con Donald Trump, quien es el virtual presidente electo de Estados Unidos, esta mañana como ya había adelantado luego de que la vicepresidenta Kamala Harris reconociera su derrota y la victoria del republicano.
La llamada -que tuvo lugar a las 9:30 horas como había adelantado la mandataria- fue “muy cordial”, aseguró en un breve mensaje en su cuenta de X, antes Twitter, el cual acompañó con una foto en el despacho en Palacio Nacional desde el cual sostuvo la conversación con el próximo presidente de Estados Unidos.
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Sheinbaum aseguró que en la conversación habló con Trump de la “buena relación que habrá” entre México y Estados Unidos.
La mandataria ya había felicitado ayer al exmandatario a través de redes sociales luego del mensaje de la actual vicepresidenta Kamala Harris y candidata presidencial demócrata.
Sheinbaum dice que no hay que preocuparse por victoria de Trump
Previamente, la presidenta Claudia Sheinbaum había llamado a la calma al asegurar que no había ningún motivo de preocupación ante el eventual triunfo de Donald Trump en las elecciones de Estados Unidos y luego de los amagos y amenazas que lanzó durante su campaña e incluso un día antes de los comicios del llamado Supermartes.
Durante su campaña electoral, Trump amenazó con aranceles a diversos productos fabricados de México, como los automóviles y a todas las exportaciones, así como deportaciones masivas de migrantes ilegales.
En el pasado, además, el republicano ha dicho que podría enviar tropas a México para combatir a los poderosos grupos del crimen organizado, que han inundado Estados Unidos de fentanilo.
Estados Unidos es el principal socio comercial de México y allí viven unos 12 millones de mexicanos, un 30% de ellos sin documentos, según estimaciones privadas.
Analistas estiman que el gobierno de Sheinbaum deberá maniobrar con cuidado ahora que Trump aseguró su regreso a la Casa Blanca, pero aún tiene espacio para negociar y suavizar el impacto en el comercio, la migración y la seguridad.
