Una riña en el penal de Chalco provocó movilización de familiares, quienes temían un motín; autoridades confirmaron que no hubo disturbios mayores
Una pelea entre personas privadas de la libertad en el penal de Chalco, Estado de México, generó alarma entre familiares, quienes acudieron al lugar preocupados ante los rumores de un presunto motín. Los hechos ocurrieron en las áreas dos y tres del Centro de Readaptación Social, ubicado en el poblado de San Mateo Huitzilzingo, donde un solo interno resultó lesionado.
Ante la creciente tensión, la Secretaría de Seguridad estatal desmintió que se tratara de un motín y aseguró que ya se mantiene comunicación con los familiares para evitar desinformación y tranquilizar a quienes se apostaron en las inmediaciones del centro penitenciario.
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Este Cereso forma parte de los 21 penales administrados por la Subsecretaría de Control Penitenciario y, de acuerdo con datos oficiales, tiene una capacidad para unos 800 internos. Sin embargo, informes previos han señalado que enfrenta sobrepoblación y deficiencias estructurales que podrían contribuir a generar conflictos entre internos.
Hasta el momento, no hay evidencia oficial de la participación de grupos criminales ni se ha indicado que el altercado tuviera una motivación distinta a conflictos internos. No obstante, especialistas señalan que estos enfrentamientos suelen estar relacionados con disputas por espacios, liderazgo o recursos dentro de los centros penitenciarios.
En lo que va de 2025, este tipo de incidentes no son aislados. Organizaciones civiles han documentado al menos cinco casos similares en diferentes reclusorios del Estado de México, lo que ha encendido las alertas sobre la fragilidad del sistema penitenciario y sus problemas de gobernabilidad y seguridad.
