La madre de 18 años habría lanzado a su bebé desde el segundo piso de un hotel, aún con el cordón umbilical, alrededor de las 6 am, justo después de dar a luz.
Una aterradora historia conmocionó a París, Francia, al dejar a miles de personas horrorizadas por la muerte de un bebé recién nacido, lo que desató una ola de indignación debido a la cruel acción de su joven madre.
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Los hechos se registraron en el Ibis Styles es un hotel económico de tres estrellas situado en la calle Rue de la Croix Saint-Simon, donde las habitaciones cuestan una media de 100 dólares, y que se convirtió en escenario de una terrible acción, pues una turista estadounidense dio a luz en el lugar y ahí mismo se deshizo de su bebé.
De acuerdo con la policía, la madre de 18 años supuestamente arrojó a su bebé desde el segundo piso de un hotel “con el cordón umbilical”, alrededor de las 6 am, momentos después de dar a luz, testigos de los hechos de inmediato se apresuraron a investigar qué era lo que la joven había arrojado y para su sorpresa se encontraron con la inquietante escena.
Al lugar arribaron servicios de emergencia, quienes llevaron al bebé al hospital Robert Debre, en tanto, la calle donde se ubica el hotel estuvo cerrada durante más de cinco horas después del incidente, dijeron fuentes a Daily Mail.
La fiscalía de París indicó al diario Le Parisien que el niño no sobrevivió a la caída y falleció a causa de sus heridas, en tanto, se ha abierto una investigación por “homicidio de un menor de 15 años”, dijo el fiscal de la ciudad al medio.
En tanto, la policía informó que la joven madre era parte de un grupo de jóvenes adultos que viajaban por Europa, y trascendió que ella también fue trasladada a un hospital para recibir atención médica y en donde finalmente fue detenida.
Esta no es la primera vez que se registra un caso de este tipo en las calles de París, hace un año, una mujer alemana fue declarada culpable de homicidio tras dejar caer a su bebé recién nacido a casi 3,6 metros de la ventana de su apartamento, supuestamente porque “le preocupaba que un bebé arruinara su carrera”.
