El sábado, tres observadores de las Naciones Unidas y un traductor resultaron heridos después de que un proyectil estallara cerca de ellos durante una patrulla a pie.
Un ataque en el sur del Líbano deja a observadores de la ONU heridos. La misión de mantenimiento de la paz de la Organización, conocida como FINUL, junto con los observadores técnicos desarmados, ONUVT, están desplegados en el sur del Líbano para monitorear las hostilidades a lo largo de la línea de demarcación entre el Líbano e Israel, conocida como Línea Azul.
Se presume que el ataque fue perpetrado por fuerzas de Israel, utilizando un dron que habría atacado el vehículo en el que viajaban dos observadores de la ONU. Se ha informado que dos de ellos perdieron la vida.
El grupo armado libanés Hezbolá ha estado llevando a cabo ataques contra el ejército israelí a lo largo de la Línea Azul desde octubre, en paralelo a la guerra en Gaza.
La FINUL condenó el ataque en un comunicado, calificándolo de “inaceptable”, y confirmó que el personal herido fue evacuado para recibir tratamiento.
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Mientras tanto, el ejército israelí negó su participación en el incidente, mientras que las autoridades libanesas están investigando para determinar las responsabilidades.
El primer ministro provisional del Líbano, Najib Mikati, condenó el ataque y las heridas causadas al personal de la ONU en el sur del Líbano, tras hablar con el comandante de la FINUL, Aroldo Lozaro.
Según Reuters, el traductor libanés herido en el ataque se encuentra en estado estable.
