Tres días después de que la líder opositora venezolana María Corina Machado fuera reconocida con el Premio Nobel de la Paz, el gobierno de Venezuela cerró su embajada en Oslo sin ofrecer explicación alguna.
Así lo informó este lunes la cancillería de Noruega, que confirmó la medida tras la inesperada suspensión de los servicios diplomáticos. Machado, a quien se le prohibió participar en las elecciones presidenciales de 2024 —comicios en los que Nicolás Maduro fue declarado vencedor pese a las denuncias de la oposición—, ha sido una de las voces más críticas del régimen.
El diario noruego Verdens Gang dio a conocer la noticia, señalando que los teléfonos de la embajada dejaron de responder desde la tarde del lunes, situación que más tarde fue verificada por la agencia AFP, al constatar que los números estaban fuera de servicio. La clausura se produce apenas unos días después de que el Comité Noruego del Nobel, conformado por cinco miembros designados por el Parlamento de ese país, anunciara la entrega del galardón a Machado.
El comité justificó su decisión destacando “su labor incansable en favor de los derechos democráticos del pueblo venezolano y su esfuerzo por impulsar una transición justa y pacífica del autoritarismo hacia la democracia”.
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Por su parte, el presidente Nicolás Maduro reaccionó duramente el domingo, calificando a la dirigente de 58 años como una “bruja demoníaca”. En respuesta a las críticas, una portavoz de la cancillería noruega recordó que “el Premio Nobel de la Paz es completamente independiente del Gobierno de Noruega”.
Desde la clandestinidad en Venezuela, Machado dedicó el reconocimiento “al pueblo sufriente de Venezuela” y expresó su gratitud al expresidente estadounidense Donald Trump, manifestando su esperanza de que su apoyo contribuya a poner fin al mandato de Maduro.
