Las ferias itinerantes se han convertido en uno de los atractivos más inusuales de Francia
En los Pabellones de Bercy, en el este de París, una gran reja metálica abre el camino a un viaje al pasado, a través de los espectáculos de las ferias itinerantes. Se trata del Museo de la Feria ambulante, un lugar que conserva la memoria de esas fiestas que viajaban por Europa en los siglos XIX y principios del XX, para divertir a chicos y grandes.
Este museo fue creado por Jean-Paul Favand, un apasionado francés que ha reunido una colección única de la Belle Époque.
“Desde hace muchos años hemos reunido objetos y curiosidades relacionadas con el teatro y el arte de la feria, que ahora son antigüedades. Son objetos muy expresivos y cargados de historia. Este lugar es un gran teatro abierto al público, en el que invitamos a un viaje hacia el año 1900. Se pueden tocar todos los objetos que hay aquí y montar en todos los carruseles. Es un lugar para divertirse”, explicó Jean-Paul Favand.
El Museo de la feria ambulante se compone de tres grandes espacios que restituyen lo que fueron las ferias populares, con sus juegos mecánicos, de destreza, de azar, los clarividentes que leían la mano o las cartas, o los populares tiovivos.
Las fiestas y ferias itinerantes atraían a un público ávido de magia, atracciones inéditas y muchas veces permitían descubrir inventos sorprendentes, como la fotografía o el cine.
Ese es justamente el tema de la 9ª edición del Festival de lo Maravilloso, que se presenta en el museo durante las fiestas navideñas. En este marco, el museo ofrece al público la posibilidad de hacerse fotos en escenarios fantásticos o de otra época.
“Hoy en día la foto es algo accesible gracias a los teléfonos celulares. Pero se ha perdido la dimensión mágica y teatral de la foto que teníamos en el siglo XIX, cuando la gente se fotografiaba en un escenario, al volante de un vehículo de carrera o en un escenario fantástico. Aquí hemos querido resucitar esa tradición, entrar en distintas escenas y fotografiarse; como bailarina de cancán o montar en una alfombra voladora junto a un faquir, por ejemplo. Hay 40 escenografías diferentes, en todo el museo, para redescubrir esa época dorada de la fotografía”, agregó Clémentine Favand, la directora del museo.
El Festival de lo maravilloso abrió sus puertas al público el pasado 26 de diciembre y estará abierto hasta el 6 de enero de 2019.
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