Las ventajas de fumar están presentes por lo que hacerlo es tu decisión, solo ten la decencia de conocer y asumir las consecuencias
Hoy es el Día Mundial sin Tabaco, pero antes de que se vayan todos los fumadores, esperen un momento pues no será la misma cantaleta sobre los peligros de fumar. Es más, hoy les voy a hablar de las ventajas del tabaquismo, pues aunque no lo crean la ciencia se ha ocupado, hasta de esos temas.
Según un estudio de la Universidad de Harvard, publicado en el diario Neurology, los fumadores eran menos propensos a desarrollar Parkingson. Esto frente a quienes no contaban con la protección del tabaco.
El porqué, no se sabe a detalle, pero dicen que podrá darte cáncer, enfisema pulmonar, apoplejía, bronquitis, diabetes, cataratas, aneurismas y muchas más, pero Parkinson, casi seguro que no.
Si te falla el corazón, te tengo una buena noticia. Todo indica que el cigarro activa los citocromas, una proteína que ayuda a ciertos fármacos a evitar coágulos en la sangre de los pacientes.
Claro que para que esto surta efecto, debes estar bajo un tratamiento por infarto. Pero no hay problema, los fumadores pueden experimentar problemas del corazón 10 años antes que un no fumador.
Te preocupa el peso y eres fumador, entonces estas del otro lado. De hecho en los 20´s las empresas publicitaban a los cigarros como una solución para que las mujeres estuvieran más delgadas.
Y es que la nicotina es un supresor del apetito, altera al hipotálamo y además le quita el sabor a los alimentos y hace que todo te sepa mal. Buenísimo, no?
Un fumador no tiene pretextos. ¿Cuántas veces hemos escuchado aquello de: “yo iba a ser muy exitoso, pero me fregué la rodilla?
Bueno, pues esto no es preocupación de los fumadores. Se tiene la teoría de que la nicotina podría prevenir el deterioro de las articulaciones y cartílagos, además de que las lesiones se dan más en corredores, y personas activas, cosa que no es de interés para muchos fumadores.
Como viste, las ventajas están presentes. Es tu decisión, así que fuma lo que quieras, es tu cuerpo y puedes hacer con él lo que se te antoje. Sólo ten la decencia de conocer y asumir las consecuencias para que luego no salgas con que no sabías qué iba a pasar.
Si llegas al hospital, de preferencia hazlo solo para que no le des a tu familia o amigos una carga innecesaria. Llega sin quejarte, al contrario, entra orgulloso porque eres de fuertes convicciones, pues te enfrentaste a un mundo de opiniones y te saliste con la tuya.
Sólo una recomendación, en lo que terminas el proceso, no le fumes a los no fumadores en la cara, pues ellos también decidieron y sobre todo respetaron tu forma de pensar.
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