La brutalidad hacia las mujeres ha sido normalizada por muchos años en varios países, afortunadamente la presión mundial hace que las autoridades actúen
Dos mujeres, madre e hija de 48 y 19 años respectivamente, se encontraban en su hogar en Bhagwanpur, una aldea del distrito de Vaishali, en la India, cuando varios hombres irrumpieron en él con el fin de violar a la joven.
“Media docena de hombres armados irrumpieron por la fuerza en mi casa e intentaron violarme. Cuando mi madre intentó salvarme, comenzaron a golpearnos”, aseguró la joven a la Policía.
Al no poder cometer sus fechorías, pues la madre luchó férreamente por defender a su hija, los asaltantes sometieron a las mujeres a diferentes vejaciones: fueron golpeadas, les afeitaron la cabeza y las hicieron desfilar por una aldea en la provincia india de Bihar.
Usaron palos para propinarles golpes, las arrastraron al exterior de su hogar, no conformes con ello llamaron a un barbero quien les afeitó la cabeza por completo, así, sobajadas, las hicieron marchar por la aldea.
Un funcionario del gobierno local y sus amigos fueron los perpetradores de los abusos contra estas mujeres, Mohammad Khurshid un concejal local, está acusado de liderar la pandilla.
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