
El peculiar vehículo, en el que viajaba junto a su hijo y sin casco, desató reacciones en redes sociales y abrió debate sobre la movilidad en la capital.
Un inusual medio de transporte llamó la atención en la Ciudad de México y rápidamente se viralizó en redes sociales: una mujer fue captada circulando con su hijo a bordo de un dinosaurio motorizado.
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El video, difundido en la plataforma X (antes Twitter), muestra a la mujer desplazándose a una velocidad considerable sobre el vehículo con forma de dinosaurio, mientras su hijo viaja con ella sin utilizar ningún tipo de protección. La escena generó sorpresa entre automovilistas y peatones, además de un intenso debate sobre la seguridad y las normas de tránsito.
El origen del peculiar transporte
Aunque no se especificó la zona ni la fecha exacta de la grabación, usuarios en redes compararon el vehículo con los modelos de dinosaurios eléctricos que suelen rentarse en centros comerciales, diseñados para niños y de baja velocidad. Sin embargo, este ejemplar parecía estar modificado o adaptado, pues alcanzaba un ritmo mayor al habitual, lo que despertó especulaciones sobre si se trataba de una bicicleta eléctrica personalizada con la carcasa de dinosaurio.
“Cosas que solo se ven en la Ciudad de México, paseando en un dinosaurio”, señala el texto sobreimpreso en el video que circula en línea.
Contexto legal y movilidad
El caso ocurre en medio de cambios recientes en la Ley de Movilidad de la capital, que establecen que bicicletas eléctricas, bicimotos y scooters que superen los 25 km/h o pesen más de 35 kilogramos serán considerados vehículos motorizados personales.
Bajo esta normativa, dichos transportes deberán contar con placa y licencia de conducir, con un periodo de gracia de 360 días para regularizarse. El proceso de registro y emisión de licencias está programado para iniciar en diciembre de 2025, bajo la supervisión de la Secretaría de Movilidad (Semovi).
El singular “paseo jurásico” abrió la conversación no solo sobre la creatividad de algunos capitalinos, sino también sobre los riesgos y vacíos legales que rodean el uso de vehículos alternativos en las calles de la ciudad.
Con información de Excelsior