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Así fue como policías detuvieron a Giovana y Mario, implicados en caso Fátima #VIDEO

Anoche agentes detuvieron en el Estado de México a los presuntos feminicidas de Fátima, ofrecieron dinero para que los dejaran libres

Gladis Giovana y Mario Alberto “N”, junto a sus tres hijos, se ocultaron en la casa de unos familiares, ubicada en el municipio Isidro Fabela, Estado de México. Luego de recibir una denuncia, agentes capitalinos llegaron para detenerlos este miércoles.

La familia se traslado a aquel municipio pues estaban huyendo de la Ciudad de México al ser acusados de secuestrar y asesinar a Fátima, una niña de siete años de edad.

Los agentes capitalinos les seguía los pasos, y catearon dos casas de Tláhuac y una de Xochimilco, donde encontraron documentos e indicios que podrían incriminarlos.

Las autoridades saben que Mario y Giovana estuvieron el domingo en Tlazala, la cabecera municipal. Ahí se reunieron con la prima hermana de Mario, identificada como Reyna Rosas y le pidieron que los dejara quedarse en su casa.

De acuerdo con el reporte oficial, tres personas se acercaron a miembros de la Guardia Nacional que patrullaban la zona en dos camionetas y delataron a los presuntos feminicidas.

Acompañados por los agentes de la Policía Municipal, los testigos se encaminaron hacia la colonia La Palma; ahí encontraron a Giovana y a Mario.

El informe de su captura detalla que los hechos ocurrieron a las 19:20 horas, y al verse descubiertos, Mario ofreció dinero a los agentes para que no los detuvieran. Por este motivo los arrestaron acusados de cohecho.

Tras ser arrestados, los dos fueron llevados a instalaciones de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México, en Atizapán de Zaragoza.

El lugar fue rodeado por elementos de la Policía de Investigación estatal, miembros de la Guardia Nacional y de la Secretaría de Seguridad del Estado.

Fueron puestos a disposición del Ministerio Público. Ahí se les hizo un examen médico. Se les fotografió de frente y perfil. En su fotografía, Gladis Giovana aparece llorando, mientras su esposo se observa tranquilo.

Ambos fueron encerrados en las galeras de la fiscalía. El lugar fue asegurado y es custodiado por un grupo especial de agentes que no permite el acceso a nadie que no esté autorizado.

Las autoridades esperan que en el transcurso del día sean trasladados a la Ciudad de México, mientras la Policía de Investigación espera la orden de aprehensión en su contra para encerrarlos por el crimen en contra de la pequeña Fátima.

Con información de Carlos Jiménez

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