Aseguran que se encontraba capturado por presuntos sicarios cuando elementos de la Sedena atacaron una camioneta de un grupo delictivo
Los padres de de Damián Tercero, de 18 años, aseguran que su hijo fue acribillado por militares durante un operativo ocurrido el 3 de julio; mismo en el que presuntamente también otros dos civiles secuestrados fueron asesinados.
Raúl Tercero, de 43 años, su padre, ha afirmado a medios que Damián se encontraba capturado por presuntos sicarios cuando elementos de la Secretaría de la Defensa (Sedena) atacaron una camioneta pick-up de un grupo delictivo en Nuevo Laredo, Tamaulipas.
El operativo
El ataque de los miembros de seguridad fue dado a conocer ayer lunes por el medio El Universal. No obstante, la nota no apuntó que uno de los abatidos era el joven. Según precisó la noticia, los militares afirmaron que arremetieron contra los delincuentes luego de que sus unidades fueran atacadas por personas armadas.
La versión oficial apunta que ellos solo repelieron la agresión y mataron a 12 de ellos. Sin embargo, el canal de noticias señala que los agentes tenían conocimiento de la presencia de civiles; así como que dieron una orden directa de liquidarlos.
Los familiares de Damian argumentan que lo identificaron entre los fallecidos de ese grupo. Según declararon, desapareció el 24 de junio junto a su hermano Alejandro, al que todavía siguen buscando.
Además, contaron que Damián llegó de Chiapas cinco meses atrás para buscar trabajo junto a su hermano Alejandro, antes de que los dos desaparecieran.
Procesos hasta ahora
Ante la denuncia, el Comité de Derechos Humanos de Nuevo Laredo lleva la representación legal. Su abogado, Martín Alvarado, denunció la “lentitud” de las investigaciones. “Si se trata de autoridades públicas, siempre tratan de enfriar el asunto para hacer que se olvide”, lamentó.
En adición, la Fiscalía General de la República abrió la carpeta 13/46 para investigar los hechos. Hasta el momento, según Alvarado, no han respondido a los requerimientos de la defensa.
Por otro lado, la FGR confirmó que está investigando, sin hacer más comentarios. Sedena, por su parte, se comprometió a colaborar con las investigaciones.
Según afirmó un portavoz militar, no se ha sancionado a ningún efectivo ni se le ha relegado de sus funciones hasta que la investigación de la Fiscalía determine las circunstancias del suceso.
Finalmente, el presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró haber dado instrucciones de investigar. “Nosotros no vamos a permitir estas prácticas”, afirmó en conferencia de prensa.
*Con información de Vanguardia/MX
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CAB
