
El influencer Markitos Toys salió a desmentir las acusaciones que lo relacionan con actividades ilícitas, luego de que surgieran versiones que lo vinculan con el narcotráfico y el lavado de dinero. A través de sus redes sociales, negó categóricamente tener alguna conexión con grupos del crimen organizado.
Desde su cuenta de Instagram, el creador de contenido negó los rumores que apuntan a una supuesta colaboración con el Cártel de Sinaloa, específicamente con el grupo liderado por “Los Chapitos”. Estas versiones se intensificaron tras investigaciones en curso por parte de autoridades de Estados Unidos y México.
El periodista Luis Chaparro ha reportado que agencias estadounidenses estarían siguiendo de cerca al influencer por presuntamente financiar a esa facción del cártel. Además, en México, la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) mantiene abiertas indagatorias sobre personas cercanas a Markitos, sospechosas de utilizar redes sociales como herramienta para lavar dinero o apoyar a organizaciones criminales.
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El escándalo tomó más fuerza en abril de 2024, cuando el propio influencer subió un video a su canal de YouTube en el que hablaba de su amistad con Néstor Isidro Pérez Salas, alias El Nini, exjefe de seguridad de Los Chapitos. Desde entonces, su nombre ha estado en la mira.
A comienzos de 2025, la controversia escaló en Culiacán cuando una avioneta arrojó volantes con nombres de supuestos influencers ligados al crimen organizado. Entre ellos figuraban Markitos Toys —a quien identificaron como “El Llorón”—, y sus hermanos Kevin Castro, alias “El Chivo”, y Gail Castro, conocido como “Gail Toys”, quien fue asesinado a tiros en marzo pasado en un restaurante de Ensenada, Baja California.