
El ataque ocurrió el pasado 20 de mayo sobre Calzada de Tlalpan, en la alcaldía Benito Juárez.
Un juez de control vinculó a proceso a seis personas presuntamente involucradas en el asesinato de Ximena Guzmán y José Muñoz, colaboradores cercanos de Clara Brugada, jefa de Gobierno de la Ciudad de México.
Los imputados son señalados por su presunta participación en la planeación y ejecución del atentado, incluyendo labores de vigilancia, seguimiento y apoyo logístico. Además, enfrentan cargos por delitos contra la salud, posesión de narcóticos con fines de comercio y portación de armas exclusivas del Ejército, de acuerdo con la investigación de la Fiscalía capitalina.
Entre los vinculados se encuentran Abraham “N”, David “N”, Joshua “N” y Sandra “N”, quienes fueron detenidos en un inmueble donde se almacenaban drogas. A todos se les impuso prisión preventiva justificada y se estableció un plazo de dos meses para el cierre de la investigación complementaria.
En una audiencia separada, Francisco “N” y Norma “N” también fueron vinculados a proceso por posesión de cartuchos de uso exclusivo de las Fuerzas Armadas y delitos relacionados con el narcotráfico. Debido a la gravedad de los cargos, su caso fue turnado al fuero federal, y permanecerán en prisión preventiva oficiosa.
Te podría interesar: Internos del Reclusorio Norte participan en concurso sonidero
Por su parte, Arturo “N” fue imputado por posesión de drogas con fines de comercio, tenencia indebida de tarjetas de circulación y narcotráfico. Se le dictó prisión preventiva, y su audiencia de vinculación se llevará a cabo el 27 de agosto, luego de que su defensa solicitara la ampliación del plazo constitucional.
Otra detenida, identificada como Nery “N”, forma parte del grupo de 13 personas arrestadas durante el operativo del 20 de agosto. Se le acusa de homicidio, feminicidio y asociación delictuosa. Permanecerá en el penal de Santa Martha Acatitla mientras se lleva a cabo su audiencia de vinculación programada para el 25 de agosto.
De acuerdo con las autoridades, los detenidos habrían participado en distintas etapas del crimen, como la vigilancia previa al ataque, seguimiento en tiempo real, uso de celulares desechables, ocultamiento de vehículos y coordinación operativa. La Fiscalía sostiene que el asesinato fue premeditado y ejecutado con precisión, utilizando al menos cinco automóviles y una motocicleta.
Hasta el momento, seis de los 13 detenidos han sido vinculados a proceso, mientras que otros enfrentan acusaciones graves que los mantienen bajo prisión preventiva. Las investigaciones continúan para determinar con precisión el papel de cada implicado y esclarecer completamente el móvil del crimen.