En un lavamanos de porcelana fueron halladas casi un millón de pastillas de fentanilo que el conductor intentaba ingresar a los Estados Unidos.
Un conductor intentó entrar a territorio estadounidense transportando dos lavamanos de porcelana a través de la garita de Otay; el contrabando de casi un millón de pastillas de fentanilo fue valuado en más de 2 millones y medio de dólares y asegurado por Aduanas y Protección Fronteriza.
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La detección del cargamento tuvo lugar este fin de semana alrededor de las 15:30 horas de la tarde cuando agentes de “Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos dirigieron una búsqueda en una camioneta de carga tipo Van color blanco marca Ford y de modelo 2000, conducida por un hombre de nacionalidad mexicana de 45 años de edad”, de acuerdo al reporte de CBP.
El conductor presentó una tarjeta de cruce de fronteras válida y un manifiesto de envío de dos lavabos de porcelana. Un oficial de CBP remitió al conductor junto con el vehículo y el envío para una inspección adicional.
Mientras revisaban el vehículo usando un sistema de imágenes, los oficiales de CBP descubrieron anomalías dentro del envío. Luego de una inspección adicional, un equipo de detección canina alertó sobre los lavabos de porcelana. Un examen exhaustivo de los fregaderos reveló un total de 12 paquetes que contenían aproximadamente 858 mil pastillas azules que dieron positivo por fentanilo.
El peso total del fentanilo fue de 189.15 libras con un valor estimado en la calle de $2 millones 574 mil dólares.
Los oficiales de CBP incautaron el envío, la camioneta de carga y las pastillas de fentanilo, y entregaron al conductor a Investigaciones de Seguridad Nacional para su posterior procesamiento.
s traficantes de narcóticos intentarán formas nuevas e innovadoras de contrabandear drogas peligrosas a través de nuestras fronteras, pero los oficiales de CBP siempre están alerta”, dijo Rosa Hernández, directora del puerto de entrada de Otay Mesa.
“Los traficantes de narcóticos intentarán formas nuevas e innovadoras de contrabandear drogas peligrosas a través de nuestras fronteras, pero los oficiales de CBP siempre están alerta”, dijo Rosa Hernández, directora del puerto de entrada de Otay Mesa.
“Gracias a la experiencia de nuestros oficiales, esta interceptación evitó que cientos de miles de pastillas de fentanilo llegaran a nuestras comunidades”.
